Sustentabilidad ambiental, eje del desarrollo
Esta semana, México es anfitrión de la V Asamblea del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés)
Los retos globales que enfrentamos en la actualidad requieren soluciones innovadoras, que coloquen al individuo en el centro de las políticas públicas, privilegien la sustentabilidad e impulsen un crecimiento que preserve los recursos naturales.
Ante estas prioridades, esta semana México es anfitrión de la V Asamblea del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés), la cual reunirá a representantes de alto nivel de más de 150 países en Cancún.
Desde su creación, en 1991, este organismo financiero internacional ha contribuido a canalizar recursos públicos para proyectos de medio ambiente, combate al cambio climático y preservación de la biodiversidad, entre otros, sirviendo como mecanismo financiero de los acuerdos ambientales multilaterales, conocidos también como Convenciones de Río de 1992.
México es miembro fundador de este fondo y ha recibido más de 450 millones de dólares para financiar proyectos relacionados con los temas arriba mencionados, además de apoyo para reducir contaminantes orgánicos persistentes, agua y degradación de la tierra.
Al ser el cuidado ambiental un reto de naturaleza global, las acciones coordinadas en el marco internacional son indispensables para atender de manera efectiva la degradación ambiental.
Por ello, la agenda global de desarrollo que deberá dar seguimiento a las acciones internacionales para atender los Objetivos de Desarrollo del Milenio (conocidos también como ODM) está en proceso de definición en el marco de la Organización de las Naciones Unidas.
Los países hemos apostado por un concepto de desarrollo que conjunte las acciones a favor del desarrollo social y económico, teniendo como elemento central el cuidado medio ambiental, buscando un desarrollo integral sustentable.
La denominada Agenda de Desarrollo Post-2015 buscará combatir las causas que reproducen la pobreza, la desigualdad, la exclusión social y la degradación de los recursos naturales, dejando en claro que no podemos pensar en una agenda de desarrollo sin atender la relevancia de la sustentabilidad ambiental.
La Agenda de Desarrollo Post-2015 es una oportunidad para impulsar transformaciones profundas y ambiciosas a nivel internacional. Estas acciones deberán estar orientadas a reducir la desigualdad e incrementar la resiliencia de las comunidades y los ecosistemas.
La V Asamblea del GEF será una excelente oportunidad para redireccionar el accionar internacional hacia la implementación de programas no sólo de conservación ambiental, sino aquellos que busquen el desarrollo integral sustentable. En tal sentido, es necesario instrumentar acciones concretas hacia la sostenibilidad del desarrollo que, a la vez, permitan ampliar las oportunidades de desarrollo para todas las personas.
En este contexto, la adecuada provisión de recursos financieros es fundamental. Los mecanismos financieros que contribuirán a la implementación de la Agenda de Desarrollo Post-2015 deberán ser flexibles y dinámicos, a efecto de alcanzar resultados óptimos.
Asimismo, atención especial debe prestarse a los países menos desarrollados y más vulnerables, contribuyendo así a reducir la desigualdad entre países.
El otro proceso multilateral que se encuentra en marcha es la negociación del nuevo acuerdo multilateral en materia de cambio climático.
A efecto de revertir el deterioro ambiental provocado por el modelo de producción y consumo actual, se deberá mejorar la eficiencia en el uso de los recursos naturales y consolidar la transición hacia una economía competitiva y baja en carbono.
La única forma de lograrlo será mediante compromisos claros y acciones de todos los países.
Así pues, los organismos internacionales como el GEF tienen la oportunidad de aportar desde sus áreas de experiencia a la implementación de una agenda de desarrollo transformadora y que logre las metas planteadas.
Al hospedar y presidir la V Asamblea del GEF, México reafirma su compromiso de ser un actor con responsabilidad global y un líder internacional a favor de la conservación del medio ambiente y de la lucha contra el cambio climático.
*Subsecretario de Asuntos Multilaterales y DDHH.