Durante el último año, La República Bolivariana de Venezuela ha estado y está sufriendo una de las mayores crisis de su historia, una situación bastante compleja que está afectando a todos los residentes del país de una forma severa. La escasez de alimentos de primera necesidad es el principal problema, al que cada semana, miles de personas, tienen que hacer frente para poder subsistir.

Desgraciadamente, los venezolanos están sufriendo una hiperinflación del 64%, un dato que refleja la pérdida del poder adquisitivo de la moneda, con la que cada vez es más difícil comprar o adquirir bienes y servicios de primera necesidad. En el último año, la escasez superó a la inseguridad como el principal problema para la mayoría de los 29 millones de venezolanos, y no es de extrañar, puesconseguir un paquete de harina o unos pañales puede suponer una auténtica odisea, pues la mayor parte de los ciudadanos deben esperar su turno durante horas en una fila, vigilada por la policía antimotines, para poder acceder a estos bienes.