Rey Felipe VI: Seré un Rey íntegro,cercano y transparente. Nuevo monarca fue ovacionado por cientos de miles de españoles.
Una verdadera ovación recibió el nuevo Rey de España. Su Majestad Felipe VI recorrió en un Rolls Royce descubierto las calles madrileñas, las que reunían a cientos de miles de personas en todo el recorrido entre el Congreso hasta el Palacio Real. Una vez arribado al palacio, el Rey, la Reina Leticia, la Princesa de Asturias y la Infanta, saludaron en el balcón del palacio, donde luego aparecieron los reyes padres, Juan Carlos I y Sofía.
La monarquía española superó con creces la prueba de popularidad, donde queda demostrado el fervor monárquico de la ciudadanía.
La ceremonia contó con un gran despliegue de caballería, cañonazos y honores, para recibir a los nuevos reyes. Dio la impresión del comienzo de una nueva España, que demostró grandeza, imperio, unidad y todo un pueblo en las calle para recibir a sus monarcas.
A las 9:35 hora local, Juan Carlos, el padre del nuevo soberano, entregó a su hijo el fajín de general que simboliza el mando supremo de las Fuerzas Armadas.
De esta manera comenzó el ceremonial con el que el nuevo monarca inicia su reinado, tras la abdicación de quien ocupó el trono durante casi cuatro décadas.
El traspaso, al que asistieron el ministro de Defensa y los altos mandos del Ejército de Tierra, el Ejército del Aire y la Marina, concluyó en medio de aplausos de los asistentes, entre quienes se contaron la infanta Elena.
El acto antecedió a la proclamación del monarca en el Congreso, que esta mañana amaneció “blindado” con la vigilancia de más de 7.000 agentes de seguridad.
Cerca de las 09:00 horas (en España) comenzaron a congregarse los primeros grupos de personas en las calles cercanas a la sede legislativa hispana.
Pasadas las 10:00 horas, la caravana que transportaba al monarca, su esposa y la familia real se trasladó hacia el palacio del Congreso de los Diputados, en medio del saludo de cientos de madrileños que observaron el paso de los vehículos.
A las 10:27, tras descender del automóvil Rolls Royce en el que viajaron, Don Felipe, Doña Letizia y sus hijas fueron saludados por unidades militares formadas fuera del palacio legislativo. El nuevo monarca recibió el saludo del Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Luego, tras la fotografía oficial, el soberano y la familia real ingresaron por la Puerta de los Leones, cubierta por un gran dosel con el escudo nacional y saludaron a las altas instituciones del Estado, antes de entrar al hemiciclo donde se celebrará la proclamación real. Allí fueron recibidos con aplausos por los asistentes.
Primer discurso del monarca
El presidente del Poder Legislativo, Jesús Posada, comenzó la ceremonia con un discurso en el que recordó la figura del hasta ayer rey y su esposa Sofía. También admitió que la sociedad española experimenta “un profundo cambio” y ha sido marcada tanto por las dificultades económicas como por el creciente descrédito que exprimenta la política en ese país.
Al mismo tiempo, expresó su lealtad al monarca y le deseó un brillante reinado.
A las 10:47, Felipe VI prestó juramento ante las Cortes Generales, lo que selló su proclamación.
A continuación, el nuevo monarca entregó su primer discurso ante el Legislativo, en el que rindió homenaje a su padre, mención que fue recibida con cálidos aplausos.
“Un reinado excepcional pasa a formar parte de nuestra historia, con un legado político” trascendental, enfatizó.
Añadió que el reinado de su antecesor consiguió “la reconciliación de los españoles” y “recuperar para nuestra nación su lugar en el mundo”.
También rindió homenaje a su madre, doña Sofía, que rindió “toda una vida impecable” al servicio de los españoles.
Felipe VI insistió en que su fidelidad a la Constitución y a los principios que marcan la convivencia democrática ha sido permanente. “En esos mismos valores, la reina y yo educamos a nuestras hijas”, declaró.
Al asumir su cargo, el nuevo rey insistió en que la monarquía parlamentaria “debe seguir brindando un servicio a España”.
“No tengan dudas, señorías, que haré honor a mi juramento y que encontrarán en mí a un jefe de Estado leal, dispuesto a escuchar y aconsejar”, aseveró.
También expresó su voluntad de establecer “una monarquía nueva en un tiempo nuevo”.
“La Corona debe acercarse a los ciudadanos”, añadió, para lo que debe mantener una conducta “íntegra y honesta”, enfatizó.
“Hoy los ciudadanos exigen que la ejemplaridad presida nuestra vida pública. El rey tiene que ser un servidor de esa justa exigencia de todos los ciudadanos”, enfatizó.
Del mismo modo, expresó su solidaridad con sus compatriotas que han sufrido las consecuencias de la prolongada crisis económica que afecta al país. “Tenemos la obligación de transmitir un mensaje de esperanza”, especialmente para los jóvenes, de que la promoción del empleo es una obligación del Estado, declaró.
En su discurso, pidió mirar hacia adelante en la tarea de construir “una España renovada”.
“Aspiramos a fortalecer nuestras instituciones” y “fortalecer nuestro sistema democrático”, aseveró. “Queremos que los ciudadanos y sus preocupaciones sean el eje de la acción política”, agregó.
También reafirmó su fe “en la unidad de España, de la que la Corona es el símbolo”, pero que no es “uniformidad”.
“La diversidad nace de nuestra historia, nos engrandece y nos ha de fortalecer”.