Destacado debut del Rey español, encabezando la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estados

El rey Felipe VI convocó hoy a la Comunidad Iberoamericana a hacer historia aprovechando su “potencia cultural” porque su “impacto transformador”, dijo, puede contribuir a la “mejora general” de un mundo que exige “aunar esfuerzos” y “dar respuestas colectivas”. Esta apuesta por la capacidad de cambio a través de la “cultura de culturas”, que según su definición supone la esencia de la comunidad iberoamericana, centró su discurso en el encuentro “Repensar Iberoamérica: Construyendo el futuro”, celebrado en el marco de la XXIV Cumbre Iberoamericana, que comienza hoy.

La cita cultural sirvió al Jefe del Estado español para hacer valer la importancia de la cooperación entre las naciones de Iberoamérica de cara a los retos de futuro, pero siempre respetando su diversidad, de la que se dio buena muestra en el evento, celebrado en el Teatro de la Reforma de la ciudad costera de Veracruz. Artistas, músicos y escritores latinoamericanos actuaron y aportaron sus distintos puntos de vista en breves intervenciones que culminaron con la entrega de los premios México de Ciencia y Tecnología a tres científicos de Chile, Juan Carlos García; Argentina, Víctor Alberto Ramos, y España, Carlos Martínez Alonso. “Estamos en un mundo donde hay que articular alianzas, hay que aunar esfuerzos, hay que realizar un trabajo común, hay que dar respuestas colectivas a desafíos que son colectivos”, proclamó el Rey desde el escenario, acompañado de los presidentes de México, Enrique Peña Nieto; Chile, Michelle Bachelet; Perú, Ollanta Humala, y Uruguay, José Mujica, y de la titular de la Segib, Rebeca Grynspan.

El Rey destacó el “sistema institucional” que tienen las naciones iberoamericanas, articulado a través de cumbres como la que hoy arranca en Veracruz, ya que proporcionan “un ámbito de encuentro donde compartir experiencias, intercambiar visiones y proyectarnos al mundo”.

Para el monarca español, la “mejor palanca que tenemos para hacerlo es esta cultura que compartimos, hecha de valores humanos como la tolerancia y la solidaridad por los demás”; “Debemos hacerla valer”, argumentó. Porque Felipe VI está convencido de que “si trabajamos por afianzar y enriquecer nuestra potencia cultural” sirviéndose de ella para “multiplicar el beneficio social y económico”, dando mayor movilidad a estudiantes, creadores, científicos y empresarios, la aportación de Iberoamérica será “histórica” y podrá cambiar el mundo. Con estas consideraciones, Felipe de Borbón instó a trabajar en los principales ámbitos de la reforma de las cumbres, que se lanza en Veracruz, en una cumbre dedicada también a la educación, la cultura y la innovación. La riqueza de las lenguas que se hablan en Latinoamérica, sus músicas, danzas, el cine, destacó, “son una excelente manifestación de esa unidad en la diversidad que identifica lo iberoamericano”, algo que ya se apuntó en la primera cumbre, celebrada también en México hace 23 años y que para Felipe VI constituye “nuestro capital principal” sobre el que “hemos construido todo lo demás”, señaló. El Rey de España aprovechó la entrega del premio México 2014 al inmunólogo español Carlos Martínez para congratularse por el reconocimiento a alguien con el que, recordó, ha compartido muchas horas cuando dirigía el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).