“No todo es Viña…” es la Columna de Opinión de Oscar “Lolo” Peña
De un tiempo a esta parte el verano se ha convertido en un semillero de Festivales Musicales, sin quedar rincón alguno a lo largo del país sin Festival. Realizados principalmente de Diciembre a Febrero obedecen a que Chile, al ser un país de clima eminentemente mediterráneo, tiene veranos secos y calurosos que permiten mucha actividad artística al aire libre.
Iniciativas de las Corporaciones Culturales de cada ciudad o directamente de los Municipios, muchos de estos Festivales comenzaron tímidamente y han ido creciendo en el tiempo y se están transformando en grandes Festivales con competencia de canciones y con el mayor atractivo que son los artistas invitados Nacionales y de renombre Internacional, esto depende directamente de los recursos con que cuenten.
Un atractivo importante son los precios de las entradas muy accesibles, siendo en muchas ocasiones sin costo de entrada para los vecinos y habitantes del propio Municipio.
Un caso destacable es Viva Dichato, que se creo para potenciar y levantar la devastada localidad de Dichato luego del terremoto y posterior tsunami del 27-F hoy se televisa y esta dentro del circuito de festivales que ya cuentan con un nombre, llego para quedarse.
Festivales Costumbristas, Folclóricos, para todos los gustos… con nombres curiosos para cualquier extranjero como puede ser el Festival de la Leche y la Carne o de La Sandía y tantos otros,como el Festival del Huaso de Olmué, Festival de La Punta, o el Festival de María Pinto, que la única pretensión es traer alegría y diversión a la juventud y las familias. Una iniciativa que hay que aplaudir.