Niña reclutada por las Farc: “Me obligaron a asesinar a mi mejor amiga”.
Las FARC fueron por un joven que resultó padecer epilepsia y “no servía para la guerra”. Se llevaron entonces a su hermana, una niña que en ese momento tenía sólo siete años.
Así fue como las FARC eligieron a Adriana (ese nombre falso lo puso el periódico El Tiempo para narrar la historia), quien pasó nueve años en la guerrilla. Los primeros cuatro años, cuenta en diálogo con el diario, fueron los más difíciles. Al principio le encargaron “cavar chontos”, unos huecos en la tierra que sirvieran como letrinas. Luego, hacer las trincheras para que la guerrilla pudiera esconderse en los combates y cargar leña.
La joven cuenta que de niña no le tocó cocinar para la guerrilla porque las ollas “eran muy pesadas”, y que como los uniformes le quedaban muy grandes, solo pudo usar uno hasta que tuvo 12 años. Fue entonces cuando la enviaron a los primeros combates. “Aprendí a manejar el fusil y varios tipos de armas. Tuve que estar en muchos enfrentamientos, vi morir a muchos compañeros, pero yo siempre sobreviví”, expresa la menor.
De acuerdo con lo que publica El Tiempo, años más tarde le ordenaron encargarse de las extorsiones y de reclutar nuevos niños para las filas. Así como la guerrilla llegó un día a su casa y la alejó de su familia, ahora era ella quien les llevaba a las FARC tres niños por semana.
Pero lo peor aún no había llegado. Adriana reveló que cuando ya se sentía “cómoda” con su vida como guerrillera, un hecho traumático cambió su vida: le ordenaron asesinar a su mejor amiga dentro de las filas porque había quedado embarazada y trató de escapar con su bebé.
“El comandante me dijo que era ella o yo. Nunca más volví a ser la misma”, concluye.
Adriana fue rescatada cuando cumplió 16 años. Y, tras pasar por varias correccionales, inició un proceso de resocialización con la Agencia Colombiana de Reintegración. Ahora estudia Medicina, carrera en la que por sus buenas calificaciones recibe cada semestre una beca.