MUNDIAL: Nueva humillación y goleada a Brasil. Perdieron el tercer lugar frente a un aplastante Holanda.
Antes del inicio del Mundial se esperaba un final de fiesta con celebración local, pero la realidad estuvo lejos de lo imaginado por muchos. Es más, Brasil ni siquiera llegó al partido definitivo del evento organizado en su casa.
Y si ya la histórica derrota que le propinó Alemania en las semifinales tenía hundido al equipo de Luiz Felipe Scolari, la caída de este sábado de 3-0 ante Holanda, en la definición del tercer lugar, hizo aún más humillante su despedida.
Fueron los europeos los que se quedaron con el “premio de consuelo”, mientras los dueños de casa dieron otra muestra de su pobreza futbolística y no pudieron ni siquiera salvar el honor en su último encuentro.
Es que tal vez muchos pensaban que el “Scratch” saldría con todo para al menos lograr algo, pero la realidad estuvo lejos de eso. Su entrenador realizó seis modificaciones respecto al once que ocupó ante Alemania y eso se notó en el campo.
Jugadores como Marcelo, Fernandinho, Hulk y Fred salieron del equipo titular, y si bien tampoco venían haciendo un gran Mundial, los que ingresaron estuvieron lejos de hacer un papel mejor que ellos.
Y eso lo aprovechó Holanda. Primero con un gol de penal de Robin van Persie a los dos minutos, uno que nació de una falta sobre Arjen Robben, la que existió, pero que dejó las dudas si fue dentro o fuera del área.
Brasil sintió el golpe y los fantasmas de una nueva goleada aparecieron rápidamente. El desazón de sus jugadores y el rostro de los hinchas lo decía todo, más aún cuando a los 16′ Daley Blind puso el 2-0 ante una pésima reacción de la defensa rival.
Los murmullos de una nueva humillación aparecían en las tribunas, sin embargo Holanda bajó las revoluciones y se preocupó más de conservar la victoria. El “Scratch” intentó con más ganas que fútbol, pero pese al dominio no le alcanzó. Es más, en los 90′ llegó el 3-0 en los pies de Giorginio Wijnaldum.
Pitazo final y el Mundial se acabó para Brasil de la peor manera. Con las manos vacías, una pobreza futbolística y dudas respecto al futuro de la selección, más aún por la continuidad de Scolari.
En tanto, Holanda se subió al podio, uno que quizás no dejó a Louis van Gaal conforme, porque ya había dicho que él quería el título. Pero algo es algo y al menos en los registros quedará que su equipo fue tercero en Brasil 2014.