Michael Jackson, acusado de nuevo de abuso sexual
El coreógrafo Wade Robson, quien comenzó a trabajar con el rey del pop cuando era solo un niño, presentó el pasado miércoles 1 de mayo unos documentos legales en los que pedía una indemnización al patrimonio de Michael Jackson en compensación por un presunto abuso sexual del artista hacia él, según ha informado el portal TMZ.
Aunque el plazo para que se puedan presentar reclamaciones contra el patrimonio del artista ya ha pasado, Robson está pidiendo ahora al tribunal que le permita presentar una alegación final. La demanda está bajo sumario por lo que no se hará pública. Sin embargo, sí que se ha especificado que en ella se describe el supuesto abuso, con una declaración jurada de un psiquiatra infantil de San Francisco, David Arredondo.
Robson, que tiene ahora 30 años, conoció a Michael cuando solo tenía cinco y por motivos de su incipiente carrera en el mundo del baile, comenzó a quedarse en casa del artista, tanto en Los Ángeles como en Las Vegas, incluyendo su rancho en Neverland, lugar que frecuentó cuanto tenía entre siete y 14 años.
El coreógrafo –quien ha trabajado con estrellas de la talla de Pink y Britney Spears– fue también uno de los testigos en el juicio contra Michael en 2005, también por abusos sexuales contra menores. Y su testimonio, junto con los de su hermana y su madre, fue fundamental para la absolución de la estrella, algo por lo que ahora sus reclamos podrían ser etiquetados como “absurdos”.
“Es absurdo. Él fue uno de los testigos más fuertes para la defensa en el juicio contra Michael Jackson en 2005. Se mostró muy firme bajo juramento, aseguró que Michael nunca había abusado de él”, declaró el abogado que defendió a Michael en 2005, Tom Mesereau, a la cadena CNN.
“Soportó un interrogatorio muy agresivo por parte del fiscal. Pero se mantuvo firme y nunca vaciló en su defensa”, añadió.
El letrado también aseguró que era “sospechoso y oportuno” que el momento de presentar la reclamación fuera ahora, precisamente al mismo tiempo que comienza también el juicio impulsado por la madre de la estrella y sus hijos –Prince de 16 años, Paris de 15 y Blanket de 11– contra la productora de conciertos AEG, a la que acusan de negligencia en la muerte del artista.
Por su parte, los abogados de AEG han manifestado que en su juicio utilizarán los cargos de abusos sexuales a menores presentados contra el rey del pop como argumento de su defensa.