Lo había advertido hace algunos días y hoy lo hizo efectivo, el candidato a la presidencia del Partido Socialista, Gonzalo Martner, presentó la acusación ante el Tribunal Supremo del PS en contra de Sebastián Dávalos Bachelet y Natalia Compagnon por su participación en el caso Caval.

La idea del ex presidente de la colectividad es que se suspenda definitivamente al hijo de la Presidenta Michelle Bachelet y su esposa, ya que a su juicio, “su actuación ha puesto en riesgo la credibilidad de la Presidenta y del gobierno”.

Recordemos que Dávalos y Natalia Compagnon se reunieron con el vicepresidente y dueño de la entidad bancaria, Andrónico Luksic, con el fin de conseguir un crédito por 6 mil millones de pesos. Dinero con el que compraron tres terrenos en la comuna de Machalí. Según lo declarado este miércoles por Martner, esta reunión se gestó bajo la utilización de “vínculos familiares para obtener beneficios al que no accedería otro ciudadano”.

A juicio de Martner, las acciones realizadas por ambos militantes y que se han conocido durante las últimas semanas, no se condicen con la actitud que debe tener un militante del Partido Socialista.

“El que quiere ser lobbista está en su derecho, somos una sociedad abierta y democrática, pero en la opinión de muchos de nosotros eso no es compatible con ser militante del PS, con ejercer la militancia”, afirmó el ex presidente del partido.

Martner sostuvo que si bien, hasta el momento, no se ha acreditado ninguna falta penal, los hechos que se han denunciado son suficientes para acreditar una grave falta a la ética y a los estatutos de la tienda.

“En el caso de los militantes Compagnon y Dávalos hay una actividad inmobiliaria con lobby de por medio. De manera tal lo que estamos pidiendo es que se aplique el estatuto del PS y el código de ética”, indicó.

“Hay una reivindicación pública de actividades que incluye lobby y eso no nos parece. Esta es una lucha que yo llevo dando hace años”, añadió.

En el borrador de la solicitud se citan los principios básicos del Código de Ética Socialista del estatuto partidario.

Entre otras cosas, indica que “ningún militante puede hacer uso de un cargo público, o incluso privado, para abusar del mismo a su favor, en el orden monetario, moral o de poder”, que los principios de los socialistas “los obligan a denunciar cualquier acto de corrupción que pueda cometer un militante o personas de confianza política que cumplan funciones en el Estado” y que el PS tiene la obligación de investigar todo acto que “atente en contra de la ética y transparencia pública y debe aplicar ejemplares sanciones contra los responsables de los mismos, excluyéndolos de sus filas”.

El escrito además contiene una acusación en contra del diputado Christian Urízar, contra quien se pedirá un pronunciamiento respecto de su formalización por el delito de fraude al Fisco en la Región de Valparaíso. Por lo que, afirman, corresponde que se le “suspenda la militancia hasta que la justicia emita un fallo definitivo”.

Fuente: Radio UChile