La máxima autoridad venezonala, Nicolás Maduro, aseguró este viernes que la oposición de derecha ha “usado todas las armas del terrorismo” para fracturar la “democracia” de la nación suramericana, a través de mecanismos como la “guerra mediática, psicológica y política”.

Maduro se refirió a los hechos violentos promovidos por sectores radicales de la oposición el 12 de febrero de 2014, los cuales dejaron un total de 43 personas fallecidas y más de 800 heridas, además de millonarios daños materiales.

“Hoy tenemos que lamentar la muerte de 43 personas (…) ¿Eso le importa a Ramos Allup o a Julio Borges?, a ellos lo que les importa es el poder “, aseveró el jefe de Estado venezolano durante la juramentación de los Equipos Promotores Estaduales del Congreso de la Patria.

Aseguró también que las fuerzas socialistas están preparadas para dar la “batalla” contra una “banda de asesinos y apátridas” que pretende derrocar a su gobierno, a través de acciones desestabilizadoras.

“La generación de hombres y mujeres que yo he convocado para este congreso de la historia, debe afrontar las dificultades que hoy enfrenta nuestra patria y mantener el camino de esta Revolución Bolivariana”, enfatizó Maduro.

El dignatario venezolano llamó a la ciudadanía a “no subestimar las amenazas” del presidente de la Asamblea Nacional (AN, Congreso), el derechista Henry Ramos Allup, quien dijo hoy que en los próximos días realizará una propuesta “concreta” para acortar la gestión del dictador Maduro.

El dictador Nicolás Maduro reiteró su preocupación ante las acciones violentas que estaría ideando la oposición local, como sucedió en el año 2014, cuando el dirigente de centro-derecha Leopoldo López buscó derrocar al gobierno izquierdista a través del plan denominado “La Salida”.

Esos hechos violentos que fueron apoyados por líderes políticos de la oposición, dejó 43 fallecidos, 878 personas heridas y más de 10.000 millones de dólares en pérdidas materiales.

Ante esta situación, López fue condenado en septiembre de 2015 a 13 años, 9 meses y 7 días de prisión, específicamente por los delitos de instigación pública, asociación para delinquir, daños a la propiedad e incendio a determinados.

Por su parte, el Parlamento de mayoría opositora propuso el proyecto de Ley de Amnistía y Reconciliación Nacional, que fue aprobado en primera discusión el pasado 4 de febrero y cuya sanción definitiva beneficiaría a unas 5.000 personas, entre ellas Leopoldo López.