La CIA cree que hasta 31.500 extremistas luchan con el Estado Islámico
Miles de de los combatientes son de origen extranjero
El número de combatientes alistados en las filas del Estado Islámico (EI) es bastante más alto de lo que se pensaba hasta ahora. Según las últimas estimaciones de la CIA, el grupo extremista islámico cuenta con entre 20.000 y 31.500 combatientes, hasta tres veces más de lo que se venía calculando.
Las nuevas cifras “reflejan un aumento de miembros gracias a un reclutamiento más fuerte desde junio, tras los éxitos en batallas y la declaración de un califato” en las zonas que ha ido controlando en Irak y Siria, dijo la fuente a la cadena CNN. Estas últimas estimaciones proceden además de una “mayor información de inteligencia”, que ha permitido precisar los datos que se venían manejando.
Otro dato preocupante: más de 15.000 extranjeros procedentes de unos 80 países han viajado hasta Siria para combatir por grupos extremistas, entre ellos el EI. Unos 2.000 son “occidentales”.
Las nuevas cifras se conocen un día después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, revelara en un discurso su estrategia para “degradar y, finalmente, destruir” el EI, con una operación militar que en principio no implicará el envío de soldados a combatir sobre el terreno, pero que sí ampliará el radio de bombardeos aéreos que se venían produciendo desde comienzos de agosto en Irak hasta Siria.
De hecho, CNN aseguró en base a fuentes del Pentágono que EE UU ha comenzado a realizar vuelos de vigilancia sobre Siria, en preparación de los anunciados ataques, cuya fecha no se ha revelado aún.
En este día en que EE UU conmemoró el decimotercer aniversario de los atentados del 11 de Septiembre, que causaron la muerte de casi 3.000 personas y supusieron el detonante de las guerras de Afganistán y, posteriormente, Irak, varios altos funcionarios reiteraron que por el momento no se tiene constancia de una amenaza concreta en territorio estadounidense.
Pese a ello, el hecho de que haya tantos extranjeros con pasaportes occidentales y hasta norteamericanos -al menos una “decena” de estadounidenses combaten con el EI, hasta un centenar con otros grupos radicales- estén siendo entrenados por el grupo extremista preocupa enormemente a unas autoridades que temen que puedan regresar a sus países de origen para perpetrar atentados domésticos.
Hasta 14 senadores republicanos enviaron al respecto este mismo jueves una carta a los secretarios de Estado, John Kerry, y de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, solicitando más información sobre los combatientes extranjeros. Los legisladores reclaman además un “plan claro y amplio” para “vigilar e impedir el viaje” a EE UU del “alto número de estadounidenses y de ciudadanos que no requieren visado para entrar en EE UU que se sospecha combaten con el EI y otros grupos terroristas”.
Esta cuestión es precisamente el tema central del encuentro que a finales de mes presidirá el presidente Barack Obama en el Consejo de Seguridad Nacional de Naciones Unidas, donde el mandatario pretende lograr acordar una resolución sobre la amenaza de los combatientes extranjeros con medidas para frenar su flujo.