La incesante ofensiva aérea israelí contra objetivos en Gaza dejaba como saldo este miércoles al menos 68 personas muertas y más de 40 heridos, de acuerdo a informes entregados por el ministerio de Salud palestino.

Según dichas fuentes, casi un tercio de las víctimas fatales son civiles.

De acuerdo a reportes locales, siete personas murieron la madrugada de este jueves por un bombardeo israelí en Jan Yunis, en el sur de la franja. Hamas, en tanto, elevó la cifra a diez.

“Tener como blanco a mujeres y niños es una prueba del fracaso del enemigo”, dijo Sami Abu Zuhri, portavoz del movimiento islamista que gobierna la Franja.

Aviones de combate alcanzaron más de 75 viviendas en el enclave en los dos días que dura la ofensiva “Borde Protector”.

Cohetes palestinos

En tanto, milicianos palestinos reanudaron el lanzamiento de cohetes contra zonas israelíes durante la noche del miércoles.

Las brigadas Al Kassam, brazo armado de Hamas, indicaron que en las últimas 48 horas dispararon 279 proyectiles, y otras agrupaciones pusieron en el aire más de un centenar.

Los militantes consiguieron aumentar el alcance de sus cohetes e hicieron blanco por primera vez en localidades al norte del país, lo que pone a su alcance prácticamente todo el territorio de Israel.

Los ataques son enfrentados por sofisticados sistemas de defensa “Iron Dome”, formados por misiles guiados capaces de interceptar los proyectiles en vuelo.

La nueva ola de violencia se desató tras el secuestro de tres jóvenes seminaristas el pasado 12 de junio en Cisjordania, quienes aparecieron muertos pocos días después. La tensión se incrementó con el asesinato de un adolescente palestino a manos de extremistas israelíes.