Una bandera negra islamista, que supuestamente pertenece al grupo radical Frente Al Nusra, ha sido puesta en la ventana del café donde al menos un islamista armado tiene los rehenes, informa ‘Daily Mail’.

El terrorista lleva una mochila y un chaleco, probablemente con una bomba.

El agresor declaró que había instalado dispositivos explosivos por toda la ciudad y que quiere hablar con el primer ministro de Australia, Tony Abbott, en directo por la radio, indica el portal news.com.au citando al vocero de la emisora de radio 2GB.

El director ejecutivo de Lindt Australia, Steve Loane, dijo al mismo portal que dentro de la cafetería puede haber unas 40 o 50 personas, entre clientes y personal. Testigos afirmaron haber visto al personal y a varios clientes de Lindt Café llorando y apoyando las manos contra las ventanas del establecimiento.

Decenas de policías armados han acordonado las calles que rodean el lugar de los hechos. La zona comercial peatonal Martin Place, donde se encuentra Lindt Café, ha sido evacuada, al igual que varios locales cercanos, después de que la Policía recibiera la alarma a las 9.45 de la mañana

Hay informaciones de que los lugares más emblemáticos de la ciudad, como la Ópera de Sydney y la Galería de Arte de Nueva Gales del Sur. También han sido evacuados el edificio del canal de televisión Channel Seven, en Martin Place, oficinas de la administración local de Nueva Gales del Sur, la Biblioteca Pública y los tribunales penales de la Corte Suprema de Nueva Gales del Sur, así como varias cámaras jurídicas de la ciudad. Las autoridades han cerrado al tráfico el puente de la bahía de Sydney.

El Consulado de EE.UU. en Sídney ha sido evacuado, y los ciudadanos estadounidenses han recibido la advertencia de permanecer en alerta máxima.

El primer ministro australiano, Tony Abbott, afirmó en un comunicado que “la Policía de Nueva Gales del Sur y la Policía Federal de Australia están respondiendo actualmente a un incidente de toma de rehenes”. Abbott afirmó que ha hablado con el primer ministro de Nueva Gales del Sur, a quien ofreció todo su apoyo y colaboración.

El Comité de Seguridad Nacional del Consejo de Ministros se ha convocado para estudiar la situación, concluyó.

Posteriormente, el primer ministro hizo una declaración para la prensa y aseguró que “desconocen los motivos” de la toma de rehenes.