Publicado En: Sab, feb 11th, 2017

¡HASTA CUANDO….!

Me pregunto cómo representarían las películas de Charles Chaplin los tiempos modernos…, si en su época se reprochaba en forma despiadada la alienación que generaba en las personas el “automatismo” de la era industrial. Imagino que tendría que ser al mejor estilo de los magos Houdini o David Copperfield, donde los sujetos, lo hechos y la realidad aparecen y desaparecen (por obra y magia de los medios de comunicaciones) vertiginosamente.

Se apagaron –perdón, desaparecieron- los incendios, lo que no estaría nada de mal después de tres semanas en que el país se transformó en una hoguera, pero lo grave es que se esfumaron con ello los damnificados, y por tanto la ayuda y la preocupación oficial… “Cualquier problema diríjase al delegado presidencial Galilea, él tiene la varita mágica para las soluciones”.

Aparecieron, como “conejos en el sombrero de un mago”, los festivales, las fiestas costumbristas y los reportajes playeros… full vacaciones… Incluso nuestra presidente no resistió la tentación y se dejó hipnotizar por sus dominios en el lago Caburga… Comprensible, hay que abstraerse de la realidad y qué mejor que en el corazón de la Araucanía…. ¡Qué alegría vivir en un país así!

Lamentablemente nuestra realidad escapa de tan agradable ficción y vive momentos demasiado nefastos, donde todo está trastrocado, desde la censurable ausencia de gobierno hasta un oscuro panorama en relación con el futuro político, económico y de estabilidad social. Ni qué decir en materias de seguridad, donde se han producido acciones propias de terrorismo criollo.

Son tantos los acontecimientos inexplicables sucedidos en el último tiempo que cada vez es más frecuente escuchar a personas, de las que uno nunca se esperó, exclamar “¡Hasta cuándo!”

Hasta cuándo vamos a aceptar nombramientos como los de Javiera Blanco, Galilea y otros.

Hasta cuándo vamos a permitir que el comunista Teillier se ría de todos y viaje en primera a Europa.

Hasta cuándo vamos a aceptar que la autoridad persiga  a los twitteros y no a los incendiarios.

Hasta cuándo tanto odio e intolerancia y tanta corrupción e ineficiencia.

Hasta cuándo vamos a ver a nuestros parlamentarios vivir en un mundo irreal.

La lista de hasta cuándo es infinita y aumenta día a día… Para muestra un botón (¡y qué botón!): el pleno de la Corte Suprema dispuso se acumularan en cuatro ministros las causas contra los militares relacionadas con materias de derechos humanos, esto a raíz de un informe del conocido ministro Sergio Guzmán en su calidad de coordinador de esta área… Es decir, la independencia de los tribunales es una mera fantasía, ellos se encuentran coordinados y ahora coludidos, según el propósito de la medida: dar agilidad y eficacia en la sustanciación de los procesos contra los militares. ¡Hasta cuándo se persigue a los militares! Hasta cuando… el colegio de abogados, las facultades de derecho o incluso el Tribunal Constitucional, guardan silencio en materias tan sensibles. ¡Buena pregunta!

Hasta que empiecen a aparecer personas como el Ministro Valdés, que votó en contra de la acumulación de causas, o como el almirante Arancibia, que se mantuvo en sus dichos: hasta que sean muchos los que quieran romper el silencio y  tengan la voluntad de hablar claro y estén dispuestos a remover los cimientos de este monumento a la mentira, al odio y a la venganza que se ha levantado en nuestros país. Así es… Las cosas van a cambiar cuando seamos más los que digamos… ¡hasta cuándo!