La revista Fortune realizó un ranking de los líderes más decepcionantes a nivel mundial y la presidente de Brasil, Dilma Rousseff, encabeza la lista con una amplia ventaja por quien le sigue un escalón más abajo.

A raíz del escándalo de corrupción conocido como Lava Jato, que involucra a la petrolera estatal Petrobras, empresarios, dirigentes del Partido de los Trabajadores de Brasil y funcionarios de los gobiernos de Lula da Silva y Dilma Rousseff, al igual que al ex mandatario, y el pedido de impeachment por parte de una importante masa de la población como así también de la oposición, Rousseff se ubica en el primer puesto con más de 250 mil votos.

En segundo lugar, pero con una considerable diferencia se ubica el gobernador de Michigan, Rick Snyder. Con 14.000 votos, el republicano fue criticado duramente por la crisis por falta de agua a causa de la contaminación en el Flint, por lo que líderes demócratas han pedido su renuncia.

La problemática, que afecta principalmente a las minorías y migrantes, empezó en abril de 2014 cuando, para ahorrar dinero, las autoridades estatales cambiaron su fuente de suministro de agua del sistema de Detroit a la del río Flint, sin tomar medidas para evitar la corrosión de las tuberías.

El tercer escalón del listado de las figuras mundiales “más decepcionantes” lo ocupan el ex presidente de la FIFA, Joseph Blatter, y el ex titular de la UEFA, Michel Platini, con 9.800 votos.

Los dos dirigentes fueron suspendidos por la crisis que se desató en el organismo deportivo y fueron encontrados culpables de “conflicto de intereses” y “gestión desleal”.

El listado completo:

1. Dilma Rousseff, presidente de Brasil

2. Rick Snyder, gobernador de Michigan

3. Joseph Blatter y Michel Platini, FIFA

4. Martin Shkreli, fundador y CEO de Turing Pharmaceuticals

5. Martin Winterkorn, ex presidente de Volkswagen

6. Jeff Smisek, ex CEO de United Continental Holdings

7. Chris Christie, gobernador de Nueva Jersey

8. Marissa Mayer, CEO de Yahoo

9. Rahm Emmanuel, alcalde de Chicago

10. Al Giordano y Steven Nardizzi, ex directivos de Wounded Warrior Project