A pesar del rechazo ciudadano a sus reformas ideológicas, Bachelet anuncia que insistirá en ellas. Un discurso muy breve  (1:50) cargado de promesas,  pero acercado  débil respecto de lo realizado concretamente. El discurso fue  muy pobre en materia de la seguridad y demandas en la  Araucania, seguridad nacional, seguridad limítrofe del país, además de la debilidad económica del país. Fue un discurso carente de soluciones y discursos contundentes.

Un discurso en el que reconoció que los últimos casos de financiamiento ilegal de campañas han provocado una “crisis de confianza” en el país, pero advirtió que eso no será una razón para postergar las reformas de su Gobierno, entre ellas, la nueva Constitución, pero sin anunciar los mecanismos con los que pretende hacer una nueva Constritución que desmantele la actual, que ha dado institucionalidad y equilibrios al sistema democrático. Consciente del delicado clima político y social que vive el país, la Jefa de Estado destacó al comienzo de su intervención que ”ha sido un año complejo e intenso. Sé que esto ha provocado razonables incertidumbres. Pero debemos mirar con perspectiva y sentido histórico lo vivido, para entender la gran oportunidad que tenemos como país”. En ese contexto, Bachelet reconoció que “por cierto que hemos tenido fallas y no voy a esconderlas bajo la alfombra.

Anunció beneficios en cuentas de luz a zonas cercanas a generadores  de energía, tendrán una baja importante en su cuenta de luz. También anunció beneficio al 5% del adulto mayor y valoró la aprobación de la Ley Ricarte Soto, además resaltó la Ley de Unión Civil, sin importar sexualidad de las personas. Además anunció un canal de Tv Cultural del Estado, sin publicidad y destinado a la diversidad cultural y geográfica del país.

Reforma a la Constitución

Haciendo hincapié en ese punto, la Presidenta destacó los avances que registró su administración en la reforma tributaria, educacional y el sistema binominal durante el año pasado, incluyendo entre ellas su decisión de iniciar un proceso constituyente en septiembre de este año. Aunque existía expectativa sobre la posibilidad de que entregara más detalles sobre el mecanismo que escogerá para elaborar una nueva Constitución, la Mandataria sostuvo al respecto que “llevaremos a cabo un proceso que garantice un equilibrio adecuado entre una participación ciudadana realmente incidente y un momento institucional legítimo y confiable”.
Sin embargo, no entregó antecedentes de cómo va a ser dicho procedimiento, lo que generó mucho rechazo de parlamentarios asistentes.

Dijo que su gran logro era eliminar el sistema binominal dejado por “la Dictadura”, en relación al Gobierno Militar Chileno.

Sebastián Dávalos Bachelet  y Natalia Compagnon, no acompañaron a la mandataria en el discurso.

Posteriormente a el breve discurso, Bachelet se dirigió al homenaje a la Armada de Chile.