Es para propulsores bencineros con turbo. El agua se inyecta directamente en la cámara de combustión, sin daños y con grandes beneficios. Ya se prueba en prototipos reales.

A todos nos enseñaron que si –por ejemplo en una inundación– le entra agua al motor, los daños pueden ser letales. Sin embargo, los ingenieros de BMW pusieron en marcha un sistema de alimentación que además de combustible inyecta agua directamente a la cámara de combustión. Sí, agua, H2O común y corriente. Lejos de provocar daños, este sistema permite que el agua se evapore al instante y ayude a refrigerar el motor desde adentro.

El agua se inyecta en forma de “fina niebla” y reduce la temperatura de la operación de combustión, lo que apareja los siguientes beneficios:

• El consumo se reduce un 8 por ciento al no tener que inyectar combustible adicional para refrigerar.
• También disminuyen las emisiones contaminantes.
• Aumenta la potencia un 10 por ciento
• No necesita bencina premium, funciona perfecto con la súper normal de 95 octanos RON/ROZ.

La marca alemana ya prueba esta tecnología con el auto de seguridad del MotoGP, que es un M4 de 431 caballos con inyección de agua. En este caso, se inyecta en los conductos de admisión y es tomada de un depósito de cinco litros que el auto tiene en el baúl y debe recargarse luego de varias vueltas a fondo.

Pero BMW, en sus Jornadas de Innovación 2015, mostró un prototipo Serie 1 con motor de tres cilindros 1.5 turbo (como el que usa el nuevo Mini) que inyecta el agua directamente a las cámaras de combustión. Lo mejor es que en este caso no será necesario cargarla: utiliza la que se genera como condensación del aire acondicionado… esas gotitas que caen al piso y hoy se desperdician totalmente.

Todavía no hay nada anunciado, pero se comenta que esta tecnología no demoraría mucho en llegar a la producción.