General Al Sisi logra victoria aplastante en presidenciales de Egipto
General Al Sisi obtenía el 93,3% de los votos emitidos en momentos en que los recuentos casi llegaban a su fin, dijeron fuentes judiciales. Su único rival, el político de izquierda Hamdeen Sabahi, logró un 3,0% de los sufragios, mientras que el 3,7% de los votos fueron declarados nulos.
Abdel Fattah al-Sisi, el general que derrocó al primer mandatario libremente electo de Egipto, logró una victoria aplastante en las votaciones presidenciales, mostraron resultados provisionales el jueves, sumándose a una larga lista de líderes procedentes de las Fuerzas Armadas.
Pero una cifra de participación más baja que la esperada plante dudas acerca de la credibilidad de Sisi, visto por sus partidarios como un héroe que puede lograr la estabilidad política y económica, reseñó Reuters.
Sisi obtenía el 93,3% de los votos emitidos en momentos en que los recuentos casi llegaban a su fin, dijeron fuentes judiciales. Su único rival, el político de izquierda Hamdeen Sabahi, logró un 3,0% de los sufragios, mientras que el 3,7% de los votos fueron declarados nulos.
Fuegos artificiales estallaron en El Cairo cuando la victoria de Sisi comenzó a quedar clara. Sus partidarios agitaron banderas egipcias y sonaron las bocinas de los coches en las calles concurridas de la capital.
Las celebraciones duraron hasta las primeras horas de la mañana.
Unas 1.000 personas se reunieron en la plaza Tahrir, el corazón simbólico de la revuelta popular que derrocó a Hosni Mubarak en el 2011 y generó las esperanzas de una democracia libre de la influencia de los militares.
Muñecos vestidos con uniforme militar rápidamente salieron a la venta en Tahrir, un recordatorio de la extendida influencia del Ejército en el país.
Sisi es el último de una línea de gobernantes egipcios procedentes de las Fuerzas Armadas que fue rota brevemente durante el período del presidente islamista Mohamed Mursi en el cargo.
Sisi, que derrocó a Mursi año pasado después de protestas masivas contra su Gobierno, es visto por sus partidarios como una figura fuerte que puede poner fin a la agitación que ha afectado a Egipto desde la revolución que puso fin a los 30 años de Mubarak en el poder.
Pero los críticos temen que se convierta en otro autócrata que preserve los intereses militares y aplaste las esperanzas de democracia y las reformas impulsadas tras la caída de Mubarak.
Sisi cuenta con el apoyo de las poderosas Fuerzas Armadas y el Ministerio del Interior, al igual que muchos políticos y ex funcionarios de Mubarak que ahora haciendo una reaparición.
“Estamos alegres porque Sisi recibió tantos votos, los resultados vendrán después de una hora, estamos aquí para celebrar”, dijo Kawther Mohamed, que fue a Tahrir con sus hijas.