Joaquín Hameau, el escritor chileno que se abre paso en España, publica su primera novela: “La Búsqueda”
Joaquín Hameau, Ingeniero Comercial de profesión, emprende una nueva aventura con su libro “La Búsqueda”, que se publica dentro de poco en España por la editorial Tandaia. Hoy por hoy está realizando estudios de postgrado en Madrid junto con el desarrollo de su carrera como escritor. Sin duda un personaje interesante al momento de hablar y compartir, ya que Joaquín presenta contradicciones prejuiciosas que a la simple vista parecen no encajar: ¿escritor e ingeniero comercial?
Joaquín, luego de titularse, comienza su carrera trabajando en una prestigiosa empresa chilena. Sus logros y trabajo lo llevaron a ser reconocido dentro de esta incluso años después de haberla dejado. Y es que Joaquín no es de aquellos que hacen las cosas a medias, él es un apasionado que hace propia las causas y responsabilidades autoimpuestas y no descansa hasta cumplir con lo que se compromete.
Durante esta misma experiencia profesional y gracias a que el estar en la empresa le requirió cambiar de ciudad, Joaquín comienza a compartir más con sus abuelos y con su primo Fernando, con los cuales desarrolla una relación única, que le ayuda comprender ciertas cosas y cuestionarse otras.
Joaquín, sabiendo que si se quedaba en Santiago tendría éxito profesional y un desarrollo de carrera prometedor, decide emprender un viaje a USA en busca de algo, que no tenía claro qué era, pero que necesitaba, en donde descubre su verdadera pasión, la escritura.
Su libro, “La Búsqueda”, no es ni más ni menos que eso. Una experiencia que pocos se atreven a realizar, que es la de soltar las amarras de lo seguro y confiar en sus propios deseos y sueños. Muchas personas buscan eternamente las cosas que creen que los harán felices y se auto convencen de que hay algo más después de conseguirlo, si es que lo hacen. Y es que es inherente a la naturaleza humana el no conformarse, pero en lo que se equivocan es que en lo material no encontraran lo que los completará como seres emocionales y pensantes. “La Búsqueda” trata el tema de estas personas, que no son pocas, que viven sumisas a un estilo de vida conformista y atrapados en “lo correcto” o “en lo que se espera de uno”, “en el deber ser”, dejando de lado sus anhelos y sueños. Quizás es muy comprometedor decir que en las páginas de esta novela encontrarán la respuesta y solución a los problemas que los afligen, y en palabras del propio autor: “Este es un libro más de preguntas que respuestas, una novela para reflexionar”. No, claro que no, el libro es un acompañamiento, un amigo, para todas esas decisiones que queremos tomar y no nos atrevemos, es ver nuestra propia historia reflejada en la de alguien más, sin más ni menos ventajas que las que poseemos. “La Búsqueda” es una ayuda, un momento de compartir con los personajes y con nosotros mismos, y una pausa necesaria en el rutinario día a día que no hace nada más que adormecernos evitando que salgamos a luchar por la vida que queremos, por la vida que nos merecemos.
Joaquín insiste en que no es autobiográfico, pero luego de leerlo y de lograr conversar con él, me pude dar cuenta cuantas similitudes tiene con la historia y eso fue algo que me obligó a leerlo nuevamente. Y es que no podía creer que alguien hubiese hecho lo narrado en su libro y que poco a poco me hace entender la misma contradicción al principio de este artículo: ¿escritor e ingeniero comercial?
El compartir ese pesar incómodo que creemos propio y único de insatisfacción con la vida, ayudará a los lectores a liberarse, a dar el paso de fe necesario para cambiar sus vidas con decisiones, con la acción a conciencia y no entorpecida con la vida perfecta, falsa y vacía que nos enseñan muchas veces las redes sociales.
“La Búsqueda” es una novela recomendada para todo aquel que busca algo más en su vida que un simple día rutinario, es para el valiente que busca la aventura y quiere darle un sentido real a la vida, llenarla de cosas y detalles que la hacen más brillante y hermosa. “La Búsqueda” es para aquel aventurero, que no quiere que sus huesos se desvanezcan cuando muera, es para aquel que se realiza, para quien quiere dejar marca para las posteriores generaciones, es para aquel que quiere decir: “Yo estuve aquí. Viví la vida que quería vivir, no la que los demás querían que viviera, y por eso fui feliz”.