El embajador estadounidense en Surcorea, Mark Lippert, se recuperaba de las heridas recibidas por un agresor quien lo cortó hoy con una cuchilla de 10 pulgadas cuando se disponía a ofrecer una conferencia en esta capital.

Lippert fue herido en el rostro y una mano, de acuerdo con los primeros reportes del incidente.

El agresor, identificado como Kim Ki-jong, de 55 años de edad, gritó antes de atacar al diplomático: “No a los ejercicios militares”, en referencia a los ensayos bélicos conjuntos Key Resolve y Foal Eagle en desarrollo en la península coreana.

Kim resultaba conocido para la policía local, en tanto que cumplió dos años de prisión por lanzarle una pieza de concreto al embajador japonés en Seúl en 2010.

El agresor también demandó la reunificación de Corea.

En Washington, el Departamento de Estado condenó el ataque, mientras que el presidente Obama llamó al diplomático para expresarle solidaridad.

Entretanto, la presidenta surcoreana, Park Geun-hye, de visita en Emiratos Árabes Unidos, calificó el hecho de agresión contra la alianza Seúl-Washington.

Las maniobras militares de Surcorea-Estados Unidos no son vistas con agrado por parte de la población surcoreana, la cual incluso reclama la retirada de unos 30 mil soldados norteamericanos que estiman, el principal obstáculo para la reunificación del país.