Mientras Bachelet era Directora de ONU mujer, utilizó su importante cargo internacional, para recaudar fondos y hacer política  ilegalmente en los Estados Unidos.

Molestia ha causado en oficinas del  gobierno norteamericano, el que Bachelet que residía en Nueva York, haya usado su cargo de ONU mujer, para invitar a embajadores, empresarios y representantes internacionales, a un yate, con  el objeto de pedir fondos para su camapaña presidencial, evento organizado por Heraldo Muñoz, actual  Canciller y ex importante autoridad d las Naciones Unidas.

Las denuncias ante el IRS fueron presentadas por la UDI el 22 de enero, en el marco del denominado “caso Yate”, luego que se revelara que el canciller Heraldo Muñoz -que en 2013 era subsecretario general del PNUD- participó en la organización de una cena realizada a borde de un yate en esa ciudad, donde los invitados debían contribuir con mil dólares para la campaña de Bachelet.

En la respuesta entregada por el IRS al gremialismo -a la que tuvo acceso La Tercera- se informa que los antecedentes  serán incorporados al programa de fiscalización que, habitualmente, realiza el organismo. “La información que usted presentó será considerada en este programa”, se lee en ese documento, escrito en inglés y remitido a los abogados de la UDI. Esto, en referencia al sistema de fiscalización de esa entidad. Sin embargo, se agrega que “no podemos revelar el estado de ninguna investigación”.

Consultado por este diario, el jefe de la bancada de diputados de la UDI, Felipe Ward, dijo que “es positivo que se haya iniciado formalmente una investigación objetiva,  que nos permitirá determinar si es que, tal como  pensamos, se produjo un acto ilegal de recaudación de fondos para la campaña de la Presidenta Bachelet, tanto respecto de la ley norteamericana como de la ley chilena”.

Junto con el actual canciller, en la organización de la cena en el yate también participaron los chilenos Mario Paredes y Juan Capello, ambos directivos de la Fundación Gabriela Mistral en EE.UU. Es por esto que, en la primera de sus denuncias, la UDI pidió que se indaguen las actividades de esta fundación, mientras que en la segunda se solicita que se investigue a la Catholic Association of Latino Leaders. En esa organización también participa Paredes, quien envió la invitación formal a la cena, incluyendo su cargo de chairman emeritus de esa agrupación.

El objetivo del gremialismo es indagar eventuales violaciones a la normativa estadounidense que rige a estas organizaciones sin fines de lucro que gozan de exenciones tributarias, y que prohíbe expresamente su participación en actividades políticas. Asimismo, la idea es detectar si en el evento hubo extranjeros que donaran dinero a la campaña de Bachelet, lo que no está permitido en la legislación chilena.