Al menos 76.021 personas, de las que 17.790 eran civiles, murieron durante 2014 en el conflicto en Siria, según el recuento publicado ayer por el grupo  Observatorio Sirio de Derechos Humanos. De los civiles, al menos 3.501 eran menores de edad y 1.987 eran mujeres.

En el bando de los opositores al régimen, 32.726 insurgentes perecieron a lo largo del año pasado, entre ellos 16.979 yihadistas de grupos como el Frente al Nusra –filial de Al Qaeda en Siria– y el Estado Islámico.

Mientras, en las filas gubernamentales, al menos 25.160 personas perdieron la vida: 12.861 eran efectivos de las fuerzas regulares, 9.766 eran integrantes de milicias civiles progubernamentales, 366 eran miembros de la organización chiíta libanesa Hizbollah y 2.167 eran combatientes chiítas extranjeros.

Además, hubo al menos 345 fallecidos cuya identidad no se ha podido establecer.

El Observatorio no descartó que el número de víctimas mortales pueda ser superior debido a la dificultad para acceder a algunas zonas del país y al secretismo que mantienen las partes del conflicto sobre sus víctimas.

Más de 200 mil personas han muerto desde el inicio de la contienda en marzo de 2011, según cálculos de la ONU.

Otra escalada

En tanto, más de 15 mil personas murieron y otras 22 mil resultaron heridas a causa de los ataques terroristas y otros actos de violencia perpetrados en Irak durante el año que acaba de concluir, informó ayer el gobierno iraquí en un comunicado oficial.

Una estadística conjunta de los ministerios iraquíes de Sanidad, Interior y Defensa precisó que un total de 15.538 personas perecieron en 2014, lo que lo convierte en el año más sangriento en Irak desde 2007, según la nota.

En ese año murieron alrededor de 18 miliraquíes, según cifras oficiales, mientras que en 2013 perecieron 6.522 en ataques terroristas y actos de violencia. De acuerdo con las cifras de la Organización de Naciones Unidas hasta el mes de noviembre, que no incluyen a los combatientes extremistas, el número de muertos en Irak por actos violentos asciende a unos 12 mil, y el de heridos, a cerca de 22 mil.

A principios de diciembre pasado, la misión de Naciones Unidas en Irak, Unami, anunció que al menos 1.232 personas murieron y 2.434 resultaron heridas en actos de terrorismo y violencia durante el mes de noviembre en Irak, salvo en la provincia occidental de Al Anbar, excluida del recuento por la dificultad en comprobar las víctimas.

Irak vive desde el pasado junio una cruenta lucha contra el grupo radical Estado Islámico, que ha proclamado un califato en zonas de ese país y de Siria bajo su control.