Publicado En: Lun, nov 17th, 2014

Sin piedad: los yihadistas estremecen al mundo con más decapitaciones

El grupo extremista difundió un video en el que les cortan la cabeza a un rehén norteamericano y a 18 soldados sirios; para Obama, fue un acto de “pura maldad”.

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La barbarie del yihadismo volvió a estremecer al mundo con lo que el presidente norteamericano, Barack Obama, definió como un “acto de pura maldad”: el grupo extremista Estado Islámico (EI) difundió ayer un video de la decapitación del rehén norteamericano Peter Kassig, el quinto ciudadano occidental en sufrir esta cruenta muerte.

Además de la decapitación de Kassig, las imágenes muestran cómo son degollados 18 soldados leales al régimen sirio de Bashar al-Assad, todos vistiendo uniformes azules, a manos del grupo extremista que logró dominar amplias partes de los territorios de Irak y Siria.

Kassig era un trabajador humanitario de 26 años nacido en Indiana. Aunque había sido soldado en Irak, abandonó el ejército y fundó una ONG para ayudar en hospitales a ciudadanos sirios que huían a Turquía y el Líbano. En esa circunstancia fue secuestrado en 2013 en la provincia siria de Deir Ezzor. Tras su captura, Kassig se convirtió al islam y se hizo llamar Abdul-Rahman.

Las imágenes del horror llegaron otra vez en un video que EI subió a las redes, aunque esta vez con un tono más “amateur”, filmado con una sola cámara, a diferencia de las anteriores producciones casi “hollywoodenses” de la misma organización.

Tras la matanza, el verdugo se acerca a la cámara y con el ensangrentado cuchillo aún en la mano amenazó a los Estados Unidos y advirtió que sus soldados podrían correr esa misma suerte. “Obama, te hemos reclamado que te retires de Irak hace cuatro años y no lo has hecho”, proclama el verdugo en el mensaje dirigido al presidente norteamericano. Después continua: “Kassig fue asesinado porque combatió contra los musulmanes en Irak mientras era soldado americano”.

La voz del verdugo está distorsionada y no está claro si se trata del mismo protagonista de las precedentes decapitaciones, bautizado “Jihadi John”, que según la prensa británica fue herido en uno de las ataques de la coalición contra EI en el norte de Siria. Pese a la distorsión de la voz, persiste el acento británico propio de “Jihadi John”.

“A Obama, el perro de Roma: hoy estamos matando a los soldados de Bashar y mañana estaremos matando a tus soldados”, dice el enmascarado, en una alusión a las crecientes versiones de que la Casa Blanca evalúa reforzar sus bombardeos para enfrentar a EI con tropas en el terreno.

Obama confirmó ayer la autenticidad del video que registra la muerte de Kassig a manos del grupo yihadista. “Hoy ofrecemos nuestras oraciones y nuestras condolencias a los padres y familiares de Abdul-Rahman Kassig, también conocido como Peter. No podemos imaginar la angustia por la que deben estar atravesando en este momento doloroso”, indicó el presidente en un comunicado.

El brutal video tiene algunas diferencias con respecto a otros donde se mostraba la misma clase de atrocidades. El traje naranja usado por las víctimas en videos anteriores, que hacía referencia a la prisión de Guantánamo, esta vez fue sustituido por un overol azul, y por primera vez, junto con la decapitación de un rehén, se muestran otros homicidios. La mayor parte de los momentos previos a la ejecución de Kassig no aparecen en el video, y los extremistas sólo exhiben en las imágenes el cuerpo del norteamericano de 26 años y no se pronuncian amenazas contra otros rehenes, como es habitual.

Algunos analistas especulan con que el cambio de formato, así como la menor calidad de la filmación, podría indicar que EI fue duramente golpeado por los bombardeos de la coalición y no está en condiciones de llevar a cabo “producciones cinematográficas” tan elaboradas como había hecho hasta ahora.

Obama fue informado del video de Kassig mientras volaba a Washington desde Brisbane, la ciudad australiana donde participó de la reunión cumbre del G-20 y donde excluyó cualquier alianza con el presidente sirio Bashar al-Assad contra EI.

Al-Assad “no tiene ninguna legitimidad y aliarse con él debilitaría la coalición que lucha contra EI y empujaría a los sirios sunnitas a sostener a los yihadistas”, explicó.

Los norteamericanos están “horrorizados” por el asesinato del operador humanitario, el tercer norteamericano y el quinto occidental asesinado por el grupo extremista desde agosto.

El caso fue condenado rápidamente por mandatarios de todo el mundo. El primer ministro británico, David Cameron, dijo estar “horrorizado por el asesinato a sangre fría” de Kassig. A estas expresiones de rechazo también se sumó el presidente francés, Francois Hollande, que definió el hecho como un “crimen contra la humanidad”.

Los padres de Kassig, Ed y Paula, reclamaron “respeto” y exhortaron al periodismo “a no hacerles el juego de los raptores” publicando la foto y el video difundidos por los yihadistas. La familia Kassig desea que “Peter sea recordado sólo por el importante trabajo realizado y por el amor que dio a amigos y parientes”.