Alemania conmemora hoy la caída del Muro de Berlín, con la caída del régimen comunista que asesinó cuentos de alemanes que buscaban la libertad de un régimen de terror. Al menos 138 perdieron la vida por intentar cruzar la “franja de la muerte”. Alrededor de 186 puntos de control y 14 mil instalaciones de seguridad para dar seguridad a esta franja de “vergüenza” que la Alemania comunista construyó para recluir a sus ciudadanos y evitar que conozcan el lado libre y en desarrollo. Se elevarán 7 mil globos luminosos en homenaje a los muertos por la Alemania Comunista.

Son 162 kilometros de barrera era el largo del Muro de Berlín, que deja a Berlín Oeste completamente aislada del mundo y sometidos a la pesadilla comunista.

La canciller alemana, Angela Merkel, afirmó este sábado que la República Democrática Alemana (RDA) fue todo menos un Estado de derecho, al tiempo que calificó de “agobiante” la eterna discusión acerca de este tema.

“La RDA no fue un Estado de derecho”,declaró la jefa del gobierno germano durante un congreso regional del partido cristianodemócrata en el estado federado de Mecklemburgo-Antepomerania, a un día de cumplirse el 25 aniversario de la caída del Muro de Berlín.

Según la canciller, la RDA fue una dictadura del proletariado bajo el mando establecido del Partido Socialista Unificado.

La ley escrita no tenía validez para la persona que cuestionara eso y, “con mala suerte”, tampoco para su familia, puntualizó Merkel, que creció en la Alemania comunista.

Por otra parte, la canciller elogió este sábado, en su tradicional vídeomensaje de los sábados, la importancia de Berlín como imán turístico, que no sólo ha marcado la imagen de Alemania sino que constituye “casi un símbolo de la unidad de Europa tras la Guerra Fría”.

Esta noche, Merkel tiene previsto inaugurar la Falling Walls Conference, un encuentro que reúne anualmente a representantes de 75 países en una plataforma única de acceso a los avances en materia de investigación científica y social de una veintena de destacados científicos.

Posteriormente se espera que la canciller pronuncie unas palabras al inicio de un concierto del cantautor Wolf Biermann, proscrito en 1976 por la RDA y que ayer en el Bundestag (Cámara baja) arremetió duramente contra los diputados postcomunistas en un acto conmemorativo de la caída del muro.

Está previsto que la canciller pronuncie mañana en el Centro conmemorativo del Muro de Berlín, situado en la Bernauer Strasse -la calle que simboliza la partición ciudadana- el primer discurso del día durante la inauguración de una exposición permanente centrada en la vida diaria detrás del muro que durante 28 años partió Berlín.